Julio y agosto son dos meses intensos para quienes viven en la costa. La afluencia de turistas es enorme y nuestro pueblo pasa de tener un puñado de habitantes a varias decenas de miles, transformándose en un gigantesco parque de atracciones, siendo el océano una de las actividades favoritas de nuestros visitantes.
Personalmente, paso mucho tiempo en la tienda Sen No Sen de Arcachon, donde el horario de apertura se ha ampliado considerablemente. Para Julien, que es instructor de surf, esto significa largas jornadas compartiendo su pasión con los turistas.
Así que, cuando el curso escolar comience de nuevo a principios de septiembre y la playa se vacíe para recuperar un aspecto más natural, será el momento de disfrutar del océano una vez más, sin prisas, sin tener que prestar atención a los demás, compartiendo esos momentos especiales que se multiplicarán durante los próximos 10 meses. Esta primera temporada baja tiene un encanto especial, sin duda.
Hoy no había muchas olas, así que cogimos las tablas grandes y nos divertimos mucho igualmente.
¡Gracias a Yannick LeToquin por las fotos!
      
      
    
    